El español Raimo Goyarrola, Obispo de Helsinki (Finlandia), reflexiona en una carta pastoral sobre el valor de la santidad en la familia y la “urgente” necesidad de que haya matrimonios fieles a Cristo.
El único obispo para los 20.000 católicos de Finlandia destaca en su misiva que Jesús “eligió nacer y vivir en una familia”, una verdad que “nos ilumina especialmente hoy, en un momento en que necesitamos con urgencia familias y matrimonios fieles a Cristo, generosos y abiertos a la vida, dispuestos a acoger el don de los hijos”.
Respecto al Concilio de Nicea, que este año se celebra su 1.700 aniversario, indica que fue decisivo para aclarar nuestra fe en la divinidad de Jesús, pero también su humanidad: “Jesús inspira en nosotros una profunda confianza: Él sabe lo difícil que puede ser la vida humana. Ha experimentado la injusticia, el sufrimiento y las luchas humanas. Su humanidad nos hace sentir cercanos a Él, alguien que realmente nos entiende porque vivió como nosotros”.
La santidad puede vivirse dentro de la familia
En este contexto, ensalza el valor de la santidad familiar y remarca que “Dios no permaneció distante en su majestad divina, sino que quiso ser uno de nosotros, vivir en una familia, experimentar la vida diaria, sirviendo a los demás, estudiando, trabajando y formando relaciones humanas”.