Santa Inés de Montepulciano

Nació en Montepulciano, (Italia) en 1268 y fue una de las figuras más brillantes de la Orden de Santo Domingo.
A los 9 años obtuvo que sus padres (que eran de una de las principales familias de la ciudad) la dejaran irse a vivir a un convento de religiosas. Allí su seriedad y su comportamiento tan inteligente le atrajeron de tal manera la confianza de las superioras que cuando apenas tenía catorce años la encargaron ya de la portería del convento y de recibir las visitas.