·PERÚ·




Santa Rosa
de Lima



Fecha Central: 30 de agosto


Fue la primera santa americana nació en Lima, Perú, el 30 de abril de 1586. Sus padres fueron Gaspar de Flores y María de Oliva. Fue bautizada con el nombre de Isabel, pero comúnmente la llamaban Rosa. En 1597 Santo Toribio de Mogrovejo, segundo arzobispo de Lima, la confirmó en Quives, Canta. Rosa se caracterizó por su humildad, sencillez, obediencia, caridad y paciencia. Muy joven descubrió su vocación a la vida religiosa y tomó como modelo de vida a Santa Catalina de Siena. Luego de un problema financiero que tuvo su padre, la familia de Rosa atravesó por una fuerte crisis económica por lo que la santa se dedicó a coser y trabajar en la huerta.

Poco tiempo después emitió sus votos de virginidad. Al cabo de diez años ingreso a la Tercera Orden de Santo Domingo y se dedicó a servir a los más necesitados, sobretodo a los pobres y enfermos. En su casa se dedicaba a rezar y a acoger a los mendigos. Durante toda su vida se entregó a Dios y al prójimo, mostró un especial cariño por Cristo Crucificado. Tuvo el don de hacer milagros y se hizo muy conocida entre los limeños.

Transcurrió sus últimos años de vida en la casa de su bienhechora María de Uzátegui (hoy Monasterio de Santa Rosa), falleció en la madrugada del 24 de agosto de 1617, a los 31 años de edad. Santa Rosa de Lima, Patrona de Hispanoamérica y Filipinas, fue beatificada por el Papa Clemente IX en 1668 y canonizada por Clemente X en 1671.

Visita también a Santa Rosa de Lima en la Enciclopedia Católica



Santo Toribio
de Mogrovejo



Fecha central: 27 de abril


Nació en Mayorga, España, en 1538. Estudió Derecho en las universidades de Coimbra y Salamanca. Fue profesor en la Universidad de Salamanca y el rey Felipe II lo nombró juez principal de la Inquisición en Granada. Algunos años más tarde quedó vacante la Sede Arzobispal de Lima, y el Rey decidió enviarlo a Lima como arzobispo, El Papa Gregorio XIII lo nombró arzobispo de Lima como sucesor de Jerónimo de Loayza. Santo Toribio llegó al puerto de Paita, Piura, en marzo de 1581 y partió hacia Lima. Ingresó a la capital del Perú el 12 de mayo del mismo año.

Durante su trabajo episcopal en Lima convocó y presidió el III Concilio Limense (1582-1583), al cual asistieron prelados de toda Hispanoamérica, y en el que se trataron asuntos relativos a la evangelización de los indios. De esa histórica asamblea se obtuvieron importantes normas de pastoral, así como textos de catecismo en castellano, quechua y aymara (los primeros libros impresos en Sudamérica). Santo Toribio visitó innumerables poblados de su amplio territorio, uno de los más extensos y difíciles del mundo. A las visitas pastorales dedicó 17 de sus 25 años de obispo.

Santo Toribio no solo confirió la confirmación a Santa Rosa, sino también a San Martin de Porres y a San Juan Macias. Celebró 13 sínodos y fundó el primer Seminario de América en Lima (1591). A los sesenta y ocho años Santo Toribio cayó enfermo en Pacasmayo al norte de Lima, partió rumbo a la ciudad de Santa e hizo su testamento en el que dejó a sus criados sus efectos personales y a los pobres el resto de sus propiedades. Murió en Santa el 23 de marzo de 1606. El "protector de los indígenas" fue un infatigable misionero y gran organizador de la Iglesia sudamericana.

Santo Toribio fue beatificado por el Papa Inocencio XI en 1679 y canonizado por Benedicto XIII en 1726. En 1983 Juan Pablo II lo proclamó Patrono del Episcopado latinoamericano.