21 de agosto

SAN PIO X, Papa

El futuro Papa santo vino al mundo en 1835, en la ciudad de Riese, en el Veneto. Era de origen humilde. Fue el segundo de los diez hijos de la pobre familia del servidor del municipio y se llamó Giuseppe Sarto.

En 1903, a la muerte del Papa León XIII fue elegido el cardenal Giuseppe Sarto para ocupar la cátedra de San Pedro. Uno de los primeros actos del nuevo Papa fue el de recurrir a la constitución "Comissum nobis" a fin de terminar, de una vez por todas, con cualquier supuesto derecho de cualquier poder civil para interferir en una elección papal, por el veto u otro procedimiento. Más adelante dio un paso cauteloso pero definitivo hacia la reconciliación entre la Iglesia y el Estado, en Italia, al levantar prácticamente el "Non Expedit".

El nombre Pío X se vincula generalmente, al movimiento que purgó a la Iglesia de ese "resumen de todas las herejías", al que alguno tuvo la ocurrencia de llamar "Modernismo".

Un decreto del Santo Oficio fechado en 1907, condenó a ciertos escritores y ciertas ideas; muy pronto le siguió la carta encíclica "Pascendi dominici gregis", en la que se indicaban peligrosas tendencias de alcance imprevisible, se señalaban y condenaban las manifestaciones del modernismo en todos los campos. El modernismo en la Iglesia quedó prácticamente aniquilado al primer golpe. Ya había conquistado bastante terreno entre los católicos y, sin embargo, no fueron pocos, aun entre los ortodoxos, quienes opinaron que la condena del Papa había sido excesiva y rayana en una mojigatería obscurantista.

En su primera encíclica Pío X anunciaba que su meta primordial era la de "renovarlo todo en Cristo" y, con ese propósito en mente, redactó y aprobó sus decretos sobre el sacramento de la Eucaristía. también estableció una comisión correctora y revisora del texto Vulgata de la Biblia (este trabajo les fue encomendado a los monjes benedictinos) y, en 1909, fundó el Instituto Bíblico para el estudio de las Escrituras y lo dejó a cargo de la Compañía de Jesús.

Dios había dado a Pío X el don de hacer milagros, la mayoría de ellos curaciones. Fue canonizado por Pío XII, en 1954, ante una multitud que llenaba la plaza San Pedro. Aquél fue el primer Papa al que se canonizaba desde de Pío V.