Hace tres años, un equipo de científicos peruanos y brasileños, con autorización de la Orden de Predicadores (Dominicos), analizó el cráneo de Santa Rosa de Lima y con moderna tecnología reconstruyó el que habría sido el verdadero rostro de la patrona de América y las Filipinas.
Los dominicos guardan en el templo de Santo Domingo, en el centro histórico de la capital peruana, los cráneos de Santa Rosa, San Martín de Porres y San Juan Masías, fallecidos hace más de 400 años.