Tras la multitudinaria Marcha por la Familia, que colmó el 24 de septiembre con más de 450.000 personas la avenida Paseo de la Reforma, en Ciudad de México, los políticos que promuevan iniciativas contra el matrimonio y la educación de los niños tendrán que considerar que "el costo político para su partido o para ellos será muy alto", advirtió un portavoz del Frente Nacional por la Familia.
En declaraciones para ACI Prensa, Carlos Alberto Ramírez Ambriz, presidente del movimiento mexicano Dilo Bien y vocero del Frente Nacional por la Familia, señaló que el 24 de septiembre "la Ciudad de México tembló", debido a "los miles de mexicanos que marchamos, en defensa de la familia y en exigencia de que los padres puedan educar a sus hijos".
"De ahora en adelante, los políticos que están empeñados en atacar a la familia, a la niñez y obstaculizan el pleno desarrollo de nuestra nación, deberán considerar que, si siguen con sus ataques, el costo político para su partido o para ellos será muy alto", dijo.