El gobierno de Estados Unidos dejará de financiar al Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) por apoyar abortos forzados y esterilizaciones involuntarias en China.
Con el recorte, el organismo de Naciones Unidas perderá 32,5 millones de dólares en su presupuesto de 2017, que el gobierno destinará a la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
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Las estrictas políticas de control natal de China han causado más de 400 millones de abortos en sus 37 años de vigor. En 2014, el país asiático cambió su política de "hijo único" por una política de "solo dos hijos".
La decisión del gobierno estadounidense fue comunicada a UNFPA en un memorando de la Secretaría de Estado, en el que indicó que el organismo de la ONU "apoya o participa en el manejo de un programa de aborto coaccionado o esterilización involuntaria" en China.
USAID tampoco podrá destinar los fondos para organizaciones que promuevan o realicen abortos en otros países, debido a una normativa reinstaurada por el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a inicios de este año.
En un comunicado publicado el 4 de abril, UNFPA lamentó la decisión del gobierno de Estados Unidos y negó las acusaciones.
La Presidenta de National Right to Life de Estados Unidos, Carol Tobias, felicitó al gobierno de Donald Trump "por dejar muy claro que Estados Unidos no apoyará a una agencia de Naciones Unidas que coopera en las políticas de control poblacional brutalmente represivas de China".
Por su parte, el Presidente del Population Research Institute, Steven Mosher, que durante décadas ha denunciado las políticas abortivas de China, aseguró en un comunicado que "cortar el financiamiento a UNFPA es una gran victoria para las mujeres de China y para todos los que respetan la inherente dignidad de cada y toda vida humana".
Mosher fue el primer testigo estadounidense de la práctica de abortos y esterilizaciones forzados en Estados Unidos, como parte de la política del hijo único que rigió durante 35 años en ese país.
"UNFPA no era una fuerza de moderación en China, sino que estaba ayudando e instigando al gobierno chino para que aplique la política", dijo Mosher.
Las investigaciones de Mosher estimaron que, entre 1979 y 2014, cada año diez millones de mujeres chinas han sido sometidas a la fuerza al aborto y esterilización.
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- ACI Prensa (@aciprensa) 1 de junio de 2015