30 de abril de 2004 / 04:19 PM
El presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, Mons. Michael Fitzgerald, se manifestó contrario a aceptar la propuesta islámica de que la Catedral de Córdoba sea utilizada también por los musulmanes y les aconsejó tener la misma actitud de la Iglesia que acepta la historia y no reclama los “edificios pasados al Islam”.
En una entrevista publicada en la agencia Asianews, el Arzobispo declaró que “es necesaria una reflexión. Al igual que el de Córdoba, otros edificios a lo largo de los siglos cambiaron su uso original, como Santa Sofía de Estambul, convertido en un museo islámico” y pidió que los musulmanes “acepten la historia” y miren “hacia delante” sin pretender “tomarse la revancha”.
Mons. Fitzgerald recordó que “Juan Pablo II visitó en el año 2001 la mezquita de los Omeyas de Damasco, que antes fue una basílica bizantina, y rezó ante el mausoleo de San Juan Bautista, pero no pidió celebrar Misa en la mezquita”.