El director ejecutivo de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ)  Madrid 2011, Yago de la Cierva, ha asegurado que el Arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Cardenal Antonio María Rouco Varela, ha invitado a hacer una mención especial en las misas al cumplirse hoy un año del inicio de las Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ) en la capital española.

Asimismo, ha indicado que el cardenal se está volcando con el continente africano para ayudarle a prepararse de cara a una posible próxima JMJ en África.

En una entrevista concedida a Europa Press, De la Cierva ha adelantado que la Organización de la JMJ celebrada el año pasado del 16 al 21 de agosto en la capital española puede aportar experiencia a África, continente donde aún no se ha celebrado ninguna JMJ y donde, a su juicio, sería "muy importante" que se celebrara un evento de estas características.

"Sería muy importante que fuera África, que es el único continente por donde no ha pasado la JMJ. Y en ese sentido, el Cardenal Rouco, cuando nos hemos enterado, ha decidido ayudar a la organización de la JMJ en África. Les podemos echar una mano con experiencia, porque se lo merecen, es un continente que vale la pena ayudar", ha subrayado.

Concretamente, ha precisado que la Unión de Conferencias Episcopales Africanas está organizando un estudio previo para decidir qué país africano sería el más adecuado para celebrar una JMJ.

Así, De la Cierva ha apuntado que, por el clima, podría ser Kenia y por la organización, Sudáfrica, después de la experiencia tras el Mundial de Fútbol de 2010.

"Hay que buscar un sitio que tenga las infraestructuras, que tenga un clima que no dé problemas de salud. Si va mucha gente de otros continentes donde no hay malaria sería un riesgo, pero en cualquier caso aunque sea difícil vale la pena intentarlo", ha señalado.

Por ello, ha indicado que es "muy difícil" que España volviera a ser elegida por el Papa para celebrar una JMJ próximamente ya que, "hay cola".

Además del continente africano, según ha explicado, han pedido organizarla Cracovia, Estonia y Corea. "Realmente no tenemos la cara de volver a pedir un privilegio de este estilo cuando hay tanta gente que la quiere", ha resaltado.

No obstante, De la Cierva considera que, si en 2011, cuando España ya estaba en medio de la crisis, la JMJ aportó "una dosis de esperanza", ahora le gustaría repetirla para volver a trasladar "un mensaje de optimismo" y de que "entre todos, se saca cualquier cosa adelante".

Frutos espirituales como medallas olímpicas

Sobre los frutos que ha dado este evento de la Iglesia Católica, De la Cierva ha advertido de que las JMJ no son como las Olimpiadas en las que al final se mide el resultado por las medallas conseguidas, sino que los frutos son "espirituales" y han quedado "en el corazón de la gente".

En todo caso, ha afirmado que hay "indicios" que muestran que ha sido "una maravilla" porque, según ha explicado, ha aumentado "el número de familias españolas que piden formación cristiana para sus hijos, el número de españoles que han puesto la X en la casilla de la Iglesia en la Declaración de la Renta, el de vocaciones no solo al sacerdocio sino también a distintas órdenes religiosas, y el de personas que participan en las actividades de las parroquias".

A doce meses de la celebración, a Yago de la Cierva le vienen recuerdos de seis días "que se pasaron volando" pero sobre todo, "de un Papa absolutamente volcado con la gente joven y de una juventud que dio una lección de alegría, de comportamiento cívico y de entender que el mensaje cristiano lleva a la felicidad, que sigue siendo actual y que realmente cambia a las personas".

Igualmente, rememora el esfuerzo colectivo de "muchísima gente", entre voluntarios, autoridades civiles, las tres administraciones, empresas, proveedores y familias que acogieron a jóvenes. "Fue una cosa absolutamente enorme", ha subrayado.

Muestra fotográfica en el retiro

En cualquier caso, durante estos 12 meses asegura que ha podido comprobar que el sentimiento de la gente al recordar esos días "no es de nostalgia" sino "un recuerdo muy agradecido de un momento único de sus vidas" pues, a su juicio, "fueron unos días de verdadera alegría en la ciudad, de entusiasmo, de sorpresa para muchos".

Este jueves 16 se cumplió un año del comienzo de la JMJ de Madrid que se inauguró el 16 de agosto de 2011 con la Misa presidida por el cardenal Rouco en la plaza de Cibeles.

Dos días después, llegaría a esa misma plaza y después de atravesar la Puerta de Alcalá junto a jóvenes de los cinco continentes, el Papa Benedicto XVI, para quedarse durante cuatro intensos días en la capital que concluyeron con un fin de fiesta en Cuatro Vientos bajo viento, lluvia y sol.

Para conmemorar el primer aniversario, el Cardenal Rouco ya ha invitado a todas las parroquias a hacer una mención especial en las misas, especialmente, en la del próximo domingo 19 de agosto.

Para celebrarlo en las calles de la ciudad, habrá que esperar hasta el mes de septiembre, cuando se presentará una muestra fotográfica sobre la JMJ en el Parque del Retiro de Madrid.