A una semana de su estreno nacional, un abogado judío pidió al Ministerio de Justicia brasileño impedir la exhibición de la película “La Pasión de Cristo” en el país porque la considera muy violenta. Lo insólito es que el jurista admitió que vio la cinta en una copia pirata que compró en la calle.
El abogado Jacob Pinheiro Goldberg envió una nota al Ministerio de Justicia exigiendo que no se permita su exhibición en el circuito comercial. "Es una apología y una distorsión histórica capaz de conducir a la discriminación antisemita", alegó el jurista que no tuvo reparos en promover el delito de piratería cinematográfica.
El episodio coronó una jornada de feroces ataques contra la cinta. Previamente, el rabino de Sao Paulo, Henry Sobel, dijo haber sentido "repulsión" y "horror" ante la "crueldad" del filme e incluso señaló que “varios obispos” lo respaldan en sus acusaciones de antisemitismo.
Sin embargo, el Presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), Geraldo Majella Agnello, quien vio la cinta junto a Sobel en una función privada de Fox, declaró a la prensa local que “no se puede concluir que hay antisemitismo” en la película.