16 de abril de 2012 / 06:36 PM
El Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, salió al paso de la polémica mediática sobre los nombres extraños que algunos padres eligen para sus hijos, y alentó a los progenitores a "buscar aquellos nombres que pueden servirle al chico también de orientación para su vida cristiana".
Luego que la conocida actriz Natalia Oreiro hiciera un comentario despectivo sobre los nombres comunes como "José" en su defensa del extravagante nombre que eligió para su recién nacido, al que llama "Merlín Atahualpa", el Arzobispo recordó en su programa televisivo "Claves para un Mundo Mejor", que "el asunto encierra una cuestión pastoral que me parece de máxima urgencia: tenemos que promover el uso de nombres cristianos".
"Las modas –sobre todo las mamás suelen ser muy sensibles a las modas- hacen que se les ponga a los chicos nombres extraños, extravagantes. Se impone una onda indigenista por allí o surge una tendencia esotérica, o se difunde el nombre del protagonista de la novela que se está viendo en esos días o de la artista o del futbolista que en ese momento brilla más. Pero aquí hay una cuestión clave: el nombre no es poca cosa, una palabra que suena más o menos armoniosa", explicó.