23 de febrero de 2012 / 11:17 PM
El Arzobispo católico de rito maronita de Damasco (Siria), Mons. Samir Nassar, calificó de "punto muerto asesino" la situación que viven los pobladores de ese país ante el enfrentamiento que sostienen rebeldes y las fuerzas armadas del gobierno sirio.
En declaraciones recogidas por la organización católica internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), Mons. Samir Nassar afirmó que la gente se Siria se encontraba soportando enromes presiones, ante el desastre económico y el conflicto armado, que ha llegado a casi todos los pueblos del país.
Según reveló el prelado, los pobladores sirios están desesperados por abandonar el país, pero no pueden acceder a visas tras el cierre de las embajadas en la capital del país, Damasco.