En una reflexión sobre la crisis económica global, el Papa Benedicto XVI señaló que el destino de cada persona está ligado al de todos, y por eso es necesario recuperar y vivir los valores como la acogida, la solidaridad y la legalidad.
Así lo indicó el Papa en su discurso a las autoridades administrativas del Ayuntamiento y la provincia de Roma, y de la región Lazio, a quienes tradicionalmente recibe en audiencia por estas fechas para el intercambio de felicitaciones de Año nuevo.
Benedicto XVI afirmó que "los desafíos actuales son múltiples y complejos. Será posible vencerlos sólo en la medida en que se refuerce la conciencia de que el destino de cada uno está ligado al de todos. Por eso, la acogida, la solidaridad y la legalidad son valores fundamentales".