Tras los enfrentamientos del 2 de febrero, provocados por partidarios del presidente egipcio Hosni Mubarak, los ánimos se encienden nuevamente entre los manifestantes, afirmó el P. Luciano Verdoscia, misionero comboniano en El Cairo (Egipto).
En la tarde del 2 de febrero, los partidarios de Mubarak, entre los que estarían infiltrados policías, comenzaron a atacar a los manifestantes concentrados en la Plaza Tahrir en el centro de la capital, con garrotes, machetes y bombas molotov.
En declaraciones recogidas por la agencia vaticana Fides, el misionero señaló que "los partidarios de Mubarak no son pocos" y que "se trata sobre todo de personas de la clase alta y media-alta de la burguesía. Recuerdo que la división entre ricos y pobres en Egipto es muy profunda y clara".