La Oficina de Prensa de la Santa Sede dio a conocer hoy un comunicado en el que expresa su rechazo y consternación por la ordenación episcopal de Joseph Guo Jincai en Chengde, provincia de Hebei en China, realizada sin autorización del Papa el pasado sábado 20 de noviembre, lo que constituye un retroceso en las relaciones entre el Vaticano y el gobierno chino.
El pasado 18 de noviembre el Vaticano ya había expresado que esta ordenación violaba además la libertad religiosa y de conciencia de los obispos que fueron obligados por el gobierno de China a asistir a la misma.
Sobre esta ordenación, el comunicado de hoy señala que "el Santo Padre recibió la noticia con gran pesar, debido a que la ordenación episcopal fue conferida sin el mandato apostólico y, por tanto, constituye una dolorosa herida a la comunión eclesial y una grave violación de la disciplina católica".