26 de abril de 2010 / 10:06 AM
Decenas de peruanos se reunieron el último sábado 24 de abril para rezar el Rosario en las afueras de la Nunciatura ubicada en este capital para defender a la Iglesia y al Papa. Metros más adelante del acto también estuvieron presentes un pequeño grupo de feministas y homosexuales que hostilizaron la pacífica defensa.
La oración que fue convocada por diversas organizaciones pro-vida y pro-familia y congregó a muchos jóvenes que no dudaron en mostrar públicamente su adhesión al Pontífice y a la Iglesia a largo de las casi dos horas de concentración, que transcurrió entre una sucesión de rosarios, cantos y lemas como "¡Viva el Papa Benedicto XVI!", "¡Viva la Iglesia!", "¡Viva el celibato!".
Al ritmo de "¡Benedicto amigo, el Perú está contigo!", los católicos efectuaron este acto de desagravio vestidos con polos blancos, con calma, ante las burlas blasfemas de miembros de las autodenominadas Católicas por el Derecho a Decidir y grupos de lesbianas y homosexuales, que mostraban su intolerancia a las declaraciones del Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Tarcisio Bertone, quien hace unos días en Santiago relacionó la pedofilia con la homosexualidad. Afirmaciones que han sido corroboradas por más de un experto.