21 de diciembre de 2009 / 10:29 AM
El Arzobispo Primado de México, Cardenal Norberto Rivera Carrera, señaló que la reciente ley que aprueba las uniones homosexuales en el Distrito Federal es una norma "inmoral, inadmisible y condenable" que "golpea en su estructura más íntima a las familias mexicanas, institución sobre la cual nuestro país ha construido su rica historia, sus valores y su espiritualidad".
El Purpurado explicó que "esta ley –que equipara la unión entre personas del mismo sexo con el matrimonio entre un hombre y una mujer– ha abierto las puertas a una perversa posibilidad para que estas parejas puedan adoptar a niños inocentes, a quienes no se les respetará el derecho a tener una familia constituida por una madre y un padre, con los consecuentes daños psicológicos y morales que provocará tal injusticia y arbitrariedad. Esto, desde luego, es absolutamente inadmisible y condenable".