20 de febrero de 2009 / 10:15 AM
Al iniciar su discurso ante los miembros de la Pontificia Comisión para América Latina (CAL), el Papa Benedicto XVI recordó el esmerado y vital servicio de Mons. Cipriano Calderón Polo, Presidente Emérito de este dicasterio que falleciera recientemente y explicó la importancia de este dicasterio el servicio al "Continente de la Esperanza".
El Papa recordó primeramente cómo la CAL surgió en 1958 "cuando el Papa Pío XII vio la necesidad de crear un organismo de la Santa Sede para intensificar y coordinar más estrechamente la obra desarrollada en favor de la Iglesia en Latinoamérica, ante la escasez de sus sacerdotes y misioneros".
"Mi venerado predecesor Juan Pablo II corroboró y potenció esta iniciativa, con el fin de resaltar la especial solicitud pastoral del Sucesor de Pedro por las Iglesias que peregrinan en aquellas queridas tierras".