Al recibir este mediodía, hora de Roma, a los miembros de la Conferencia de Presidentes de las Principales Organizaciones Judías de Estados Unidos, el Papa Benedicto XVI reiteró una vez más, al referirse al holocausto judío, "que toda negación o minimización de este terrible crimen es intolerable y totalmente inaceptable".
Al iniciar su discurso, el Papa recordó su visita al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau en mayo de 2006: "mientras entraba a ese lugar de horror, la escena de un sufrimiento indecible, pensaba en los innumerables prisioneros, muchos de ellos judíos, que habían pisado ese mismo camino en la cautividad en Auschwitz y en todos los otros campos de prisioneros", dijo.
"Cómo empezamos a comprender la enormidad de lo sucedido en aquellas infames prisiones? Toda la raza humana siente una profunda pena por la brutalidad salvaje contra vuestro pueblo en esa hora".