19 de noviembre de 2008 / 02:28 PM
La misionera herida el pasado 28 de octubre durante un enfrentamiento bélico en Rutshuro (República Democrática del Congo), Presentación López Vivar, afirmó "no tener miedo" y se mostró "dispuesta a volver al país africano para servir a las necesidades de su población", durante la rueda de prensa celebrada en la madrileña clínica de Santa Elena, donde la religiosa se recupera de la doble amputación de piernas a la que fue sometida.
La burgalesa aseguró encontrarse bien físicamente y con fuerzas, y aprovechó el encuentro con los medios de comunicación para demandar "el incremento de la ayuda humanitaria que se envía", ya que la considera "insuficiente" para hacer frente a las necesidades de los miles de enfermos y desplazados que sufren las consecuencias del conflicto armado.
Asimismo, López Vivar quiso agradecer al Ministerio de Asuntos Exteriores español la rapidez y eficacia con la que actuaron para que las misioneras fueran evacuadas y atendidas, así como a la protección ofrecida por el personal de la ONU desplazado al lugar. "Estoy muy agradecida por la cercanía del Gobierno de España y de la Embajada y por todas las muestras de cariño y preocupación", declaró.