El Sindicato de Médicos de Egipto, dominado por los "Hermanos musulmanes", una facción extremista del Islam, prohibió el transplante de órganos entre quienes profesan la fe islámica y los cristianos; lo que ha generado una serie de protestas y malestar en ambas comunidades.
Según informa la agencia EFE, un vocero de la Iglesia Copta señaló ante esta controvertida decisión que "todos tenemos la misma sangre egipcia y si el motivo de la medida es prohibir el tráfico de órganos, lo rechazamos porque puede ocurrir también entre fieles de la misma religión".
La misma fuente indica que esta decisión del sindicato es "muy grave", ya que puede conducir a otros pasos como prohibir las donaciones de sangre entre cristianos y musulmanes o impedir a un médico que examine a un enfermo de distinta religión.