30 de junio de 2008 / 02:51 PM
El Arzobispo Primado de México, Cardenal Norberto Rivera Carrera, destacó que al recordar a los santos Pedro y Pablo, los fieles son invitados a "revisar nuestra fidelidad en la Iglesia ya que Pablo nos muestra esa fidelidad a Cristo hasta llegar al martirio y Pedro" recuerda que "Cristo es la piedra viva que no cae, el Pastor que no engaña jamás".
En su homilía pronunciada en ocasión de la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, el Purpurado mexicano resaltó que la contemplación de estos apóstoles "nos lleva a pedir a Dios en la misa de hoy: 'Haz que tu Iglesia se mantenga siempre fiel a las enseñanzas de éstos apóstoles, de quienes recibió el primer anuncio de la fe'"
El Cardenal Rivera también indicó que con esta solemnidad "la Iglesia vuelve a sus raíces y celebra su apostolicidad. Esto significa celebrar su fundamento apostólico, gracias al cual la Iglesia se une directamente, sin vacíos y sin mediaciones, a su piedra angular que es Cristo Jesús".