El Servicio Andaluz de Salud (SAS), denegó la objeción de conciencia al ginecólogo Esteban Rodríguez Martín, quien recurrió a este derecho para no participar de las pruebas de diagnóstico prenatal (DPN), que si bien sirven para detectar anomalías en el feto, también son usadas para practicar la eugenesia con aquellos bebés que presentan taras más o menos graves.
Según informó Juan Molina Valdés, de la Asociación Nacional para la Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia, el médico durante más de seis años fue exonerado de realizar o colaborar con los DPN en el Servicio de Ginecología del hospital del SAS donde laboraba, por causarle "un conflicto de conciencia".
Sin embargo, tras cambios en la dirección del Servicio, fue instado a realizar algunas de estas pruebas. Sus repetidos intentos de arreglar la situación dentro del propio servicio fueron infructuosos: la presión a que fue sometido desembocó en una situación de estrés que le obligó a requerir asistencia facultativa, tras la cual se ordenó su baja médica, y plantear la objeción de conciencia, tanto a la Dirección del Hospital como al Colegio de Médicos.