Al recibir esta mañana a los participantes del congreso interacadémico de la Academia de Ciencias de París y de la Pontificia Academia para las Ciencias, el Papa Benedicto XVI destacó que la ciencia no es capaz de comprender la complejidad del misterio humano, y que el hombre goza de una libertad que revela el sentido de su existencia.
Hablando a los científicos reunidos para el evento titulado "La identidad mutable del individuo", el Pontífice afirmó que en nuestra época "las ciencias exactas, naturales y humanas han conseguido avances prodigiosos en el conocimiento del hombre y de su universo", pero que al mismo tiempo "es fuerte la tentación de circunscribir totalmente la identidad del ser humano y de encerrarlo en el saber conocido".
Por eso, "para no emprender ese camino es importante no dejar de lado la investigación antropológica, filosófica y teológica, que ponen de manifiesto y mantienen el misterio propio del ser humano, porque ninguna ciencia puede decir quién es, de donde viene y a donde va. El saber del ser humano se convierte, pues, en el saber más necesario", agregó el Papa.