El Arzobispo de Valencia, Cardenal Agustín García-Gasco, aseguró que las ideologías que se han ido sucediendo, en especial las del siglo XX, "tratan de construir una sociedad perfecta rechazando radicalmente a Dios" y "están convencidas de que el camino del futuro pasa por expulsar a Dios de la ciudad humana".
"Esta locura solo produce nuevos atentados contra la humanidad, especialmente contra las personas más indefensas: genocidios, terrorismo, armas nucleares, torturas, eliminación de los no nacidos, manipulación genética, etc.", señaló el Purpurado en una Misa por la solemnidad de la Inmaculada Concepción.
"Cuando el progreso humano aspira a expulsar a Dios, acaba siendo ‘progreso’ de unos pocos para oprimir a muchos. Es un fraude", aseveró.