Después de la Misa de Gallo, donde se celebra el Nacimiento de Jesucristo, algunas familias en su hogar se reúnen a recordar este acontecimiento. Antes de la cena y de abrir los regalos, toman unos momentos para meditar la razón por la cual están reunidos. A continuación se presenta un esquema para hacer esta reflexión. Por lo general esta reflexión la dirige la cabeza de la familia; la Corona de Adviento tiene las cuatro velas encendidas y se agrega una vela de color blanco o el cirio pascual (apagado) en el centro. El esquema que se muestra puede variar; lo importante es recordar a los presentes que Cristo ha nacido.

1. INICIO

En el nombre del Padre, y del Hijo y del espíritu Santo.
(se puede entonar un canto de Navidad antes de dar la bienvenida)

2. BIENVENIDA

Hermanos, hoy nos hemos reunido aquí para manifestar alegremente que Jesús, nuestro Dios y Salvador, ha nacido. Alegría por que con la llegada de Jesús nuestros pecados serán perdonados y la muerte vencida. Que el amor del Padre, el nacimiento del Hijo y la gracia del Espíritu Santo estén con ustedes.

- Y también contigo.

3. PERDÓN

Al profundizar en el nacimiento del NIño Jesús, comtemplamos con asombro el inmenso amor que Dios nos ha tenido haciendo que su propio Hijo venga al mundo haciéndose hombre como nosotros en el seno de María Santísima. Este milagro de amor debe llevarnos a mirar nuestro interior y preguntarnos: ¿cómo respondemos a Dios frente a todo lo que ha hecho por nosotros?; ¿ocupa el Señor un lugar importante en nuestras vidas?; ¿hemos vivido la caridad con las personas que nos rodean?; ¿hemos vivido la caridad con los más necesitados? Con verdadera esperanza pidamos perdón a Dios

(Se deja unos momentos de silencio)

Yo confieso ante Dios todopoderoso
y ante ustedes hermanos, que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión,
por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa.
Por eso ruego a Santa María siempre Virgen,
a los ángeles, a los santos
y a ustedes hermanos
que intercedan por mí
ante Dios nuestro Señor.

4. LITURGIA DEL EVANGELIO

Escuchemos ahora la palabra de Dios:
Lectura del Santo Evangelio según San Lucas 2, 1-14

Al terminar: Te alabamos Señor.

Si se tiene el cirio

Señor así como encendemos esta luz para recordar que estás entre nosotros, Tú que eres luz del mundo enciende nuestras vidas. (Se enciende el cirio).
Enseguida los que quieran pueden hacer una breve reflexión sobre la lectura. De ser posible explicitando la propia experiencia frente al Nacimiento de Cristo en el propio corazón.

5. ORACIÓN

Ahora unámonos en oración pidiéndole a Dios que reine por siempre en nuestras familias. Respondemos: escúchanos Señor.

- Escúchanos Señor.

Por la Iglesia, para que con tu llegada renueve su misión de llevar esta Buena Nueva a todos aquellos que aún no te conocen.

- Escúchanos Señor.

Para que tu llegada inspire más vocaciones al servicio de Tu Iglesia. Por el Papa, los obispos, los sacerdotes, los religiosos y los consagrados, para que se mantengan fieles en tu servicio.

- Escúchanos Señor.

Por aquellos que sufren, aquellos que hoy no tienen un techo, un pan, están enfermos, o viven en medio de la guerra, socórrelos y dales consuelo. Haznos más generosos para atender las necesidades de los que nos rodean.

- Escúchanos Señor.

Por la familia, para que esta Iglesia doméstica unida en torno a Ti, se mantenga firme en tu amor. Haz que crezca y se multiplique. Concédele reunirse de nuevo para recordar tu llegada a éste mundo.

- Escúchanos Señor.

Para que seamos siempre agredecidos por este misterio de amor y reconciliación y que nuestro agradeciemiento se manifieste en la alegría y el amor a Dios y los demás.

- Escúchanos Señor.

( se pueden agregar más peticiones)

6. GLORIA

Al unísono con los ángeles y pastores repitamos :

( mientras se reza el Gloria, alguna persona como el más pequeño de la familia toma la imagen del niño Jesús pasándolo a todos los presentes para que lo besen, recordando la adoración de los pastores a Jesús nuestro Dios en Belén).

Gloria a Dios en el cielo,
y en la tierra paz a los hombres
que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria
te alabamos, te bendecimos,
te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias,
Señor Dios, Rey Celestial,
Dios Padre todopoderoso.
Señor, Hijo único Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios
Hijo del Padre;
tu que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestra súplica;
tú que estas sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros;
porque sólo tú eres Santo,
sólo tú señor,
sólo tú Altísimo, Jesucristo,
con el Espíritu Santo
En la Gloria de Dios Padre.

Amén.

(Al terminar se coloca al niño Jesús en el pesebre del nacimiento mientras los asistentes entonan un canto de Navidad).

7. DESPEDIDA

Hermanos, que la luz de Cristo brille por siempre en nuestras vidas. ¡Feliz Navidad!