Jueves 7 de noviembre

Evangelio según San Lucas, capítulo 15, versículos del 1 al 10

Parábola de la oveja descarriada

1 Todos los publicanos y los pecadores se acercaban a El para oírlo. 2 Mas los fariseos y los escribas murmuraban y decían: "Este recibe a los pecadores y come con ellos". 3 Entonces les dirigió esta parábola: 4 "¿Qué hombre entre vosotros, teniendo cien ovejas, si llega a perder una de ellas, no deja las otras noventa y nueve en el desierto, para ir tras la oveja perdida, hasta que la halle? 5 Y cuando la hallare, la pone sobre sus hombros, muy gozoso, 6 y vuelto a casa, convoca a amigos y vecinos, y les dice: "Alegraos, conmigo, porque hallé mi oveja, la que andaba perdida". 7 Así, os digo, habrá gozo en el cielo, más por un solo pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no tienen necesidad de convertirse".

La dracma perdida

8 "¿O qué mujer que tiene diez dracmas, si llega a perder una sola dracma, no enciende un candil y barre la casa y busca con cuidado, hasta que la halla? 9 Y cuando la ha encontrado, convoca a las amigas y las vecinas, y les dice: "Alegraos conmigo, porque he encontrado la dracma que había perdido". 10 Os digo que la misma alegría reina en presencia de los ángeles de Dios, por un solo pecador que se arrepiente".

Comentario

4. Empiezan aquí las tres parábolas llamadas de la misericordia, en que Jesús nos muestra, como una característica del Corazón de su Padre, la predilección con que su amor se inclina hacia los más necesitados, contrastando con la mezquindad humana, que busca siempre a los triunfadores.

8. La dracma equivale a un dólar argentino.

10. Si para nuestro corazón, tan pobre, es un gozo incomparable presenciar la conversión de un amigo que había perdido la fe, ¿qué será esa alegría de los ángeles, que hallan corta la eternidad para alabar y querer y bendecir y agradecer?


Estos comentarios corresponden a la versión electrónica de la Biblia y Comentario de Mons. Juan Straubinger, cortesía de VE Multimedios