Se extiende "la sociedad de la vigilancia". Los riesgos de las redes sociales en Internet

Por Agustín Alonso-Gutiérrez
Fuente: Aceprensa

"Jóvenes neozelandeses ofrecían droga a través de Bebo". "Una chica californiana de 13 años, víctima de abusos por MySpace". "Las autoridades de Belfast consternadas por la violencia sectaria hallada en algunos espacios de Bebo". "Arrestadas diez personas en Brasil acusadas de vender drogas a través de Orkut". "Violadores atraen a fiestas a chicas irlandesas mediante Bebo". "Mal uso de Facebook fuerza a expulsar alumnos en colegios en Nueva Jersey". "Arrestado en India un estudiante que creó en Orkut una falsa cuenta desvelando datos personales de una compañera"... Facebook, My Space, Orkut o Bebo no son los nombres de bandas criminales ni redes mafiosas, sino algunos de los más importantes sitios web de redes sociales que llenan Internet.

Este tipo de espacios en la Red están adquiriendo una enorme fuerza y se postulan como uno de los fenómenos del presente y el futuro en el uso del ciberespacio. Los titulares –reales– citados más arriba señalan algunos de los riesgos a los que se pueden ver expuestos jóvenes y adolescentes sin que sus padres sean conscientes.

El tráfico que acumulan los principales sitios web de este tipo se acerca al que tienen Yahoo! o Google. En Estados Unidos, el sitio más visitado de todo Internet es precisamente MySpace y en el Reino Unido, Bebo es el cuarto, y el primero en Irlanda o Nueva Zelanda. Orkut, el sitio lanzado por Google, ha aumentado vertiginosamente su tráfico hasta acercarse a los niveles de MySpace. En España, el uso de las redes sociales de Internet es muy reducido, en comparación con otros países. Lo más parecido a este tipo de redes sociales que estén teniendo éxito en español son OpenBC/Xing (www.xing.com) o Neurona (www.neurona.com), aunque va dirigido a establecer contactos profesionales más que personales. El uso de Internet como medio de relación social entre los adolescentes españoles se sigue desarrollando fundamentalmente a través del Messenger.

La preocupación expresada por padres y educadores con respecto a estos sitios web ha hecho, por ejemplo, que dos importantes ejecutivos de la compañía Bebo, con sede en California, hayan viajado a Gran Bretaña e Irlanda para reunirse con autoridades policiales y representantes de la sociedad civil para discutir posibles medidas de seguridad.

Un imán para los jóvenes

Las redes sociales en Internet son un imán para los más jóvenes. En esos sitios, puede crear su propio mundo, a través del que establece relaciones con el de otros (ver Aceprensa 112/06). Padres y educadores no deberían obviar la existencia de unos "lugares" de ocio que no parecen un fenómeno efímero y que influirán en la educación de sus hijos. A la vez, deben compartir con las autoridades la preocupación por la falta de seguridad que puede derivarse de estas web.

Porque el usuario de estos sitios está, por definición, dispuesto a compartir imprudentemente información personal con amigos y otros jóvenes, cuando no con el mundo entero. Bajo la presión de los medios y de la opinión pública, Orkut, MySpace y Bebo están aplicando medidas de seguridad para frenar el abuso por gente que se acerca a estos sitios con turbias intenciones. La mayoría de estas medidas consiste en mecanismos de denuncia atendidos por una oficina central propia, o incluso desviados hacia las autoridades competentes. La denuncia podría ser efectuada por víctimas o testigos de abusos, garantizando una respuesta en alrededor de 24 horas. Pero los hechos han demostrado por ahora que no siempre se llevan a cabo las respuestas adecuadas a estos problemas o no son lo suficientemente expeditivas. Se plantea la necesidad de ofrecer mecanismos más restrictivos para disminuir el uso entre los más pequeños (Bebo limita la edad a los 13 años, Orkut y MySpace a los 14) e impedir la falsificación de la edad, tanto por parte de esos menores como por parte de pederastas que se hagan pasar por jóvenes. Por ahora no hay manera de confirmar la edad real del usuario que se suscribe.

Sin embargo, por numerosos que sea los parches y las precauciones, parece que la mejor manera que tienen los padres de enfrentarse a los riesgos de las redes sociales de Internet es conocerlas y enseñar a los menores a usarlas responsablemente. Porque, en cualquier caso, los mayores riesgos proceden no de la difusión de sus datos personales, sino del uso excesivo e inapropiado de unas herramientas cuya oferta de entretenimiento (además de las redes sociales, el joven puede encontrar miles de vídeos, canciones o información) amenaza con devorar el tiempo de los adolescentes y dejar los riesgos que siempre se han deducido de la televisión a la altura de lo inocuo.


Información elaborada a partir de un artículo de MercatorNet.com firmado por Luisón Lassala, director del Anchor Youth Centre en Dublín y consultor "freelance" de Tecnologías de la Información.