Quinto Día de la Novena a San Patricio

Acto de Contrición:

Pésame Señor y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido. Pésame por el infierno que merecí y por el cielo que perdí; pero mucho más me pesa porque pecando ofendí un Dios tan bueno y tan grande como Vos; antes querría haber muerto que haberos ofendido, y propongo firmemente nunca más pecar y apartarme de las ocasiones próximas de pecado. Amén

Oración para cada día:

Santo Obispo Patricio, fiel pastor de la grey real de Cristo, que iluminaste a Irlanda con el resplandor del Evangelio, que es la fuerza poderosa de la Trinidad, ahora que gozas de la Bienaventuranza Eterna, intercede para que el Redentor nos preserve  en la fe y la caridad. Por Jesucristo, Nuestro Señor, Amén.

Invocación Quinto Día:

Por mi bienestar y mi protección, hoy Pido que el poder de la Santísima Trinidad me rodee.

Del libro Confessio de San Patricio:
Así, en la medida de mi fe en la Trinidad, me conviene distinguir y, sin reparar en el peligro, hacer conocido el don de Dios y la consolación eterna, sin temor difundir con confianza el todas partes el nombre de Dios, para, incluso después de mi muerte, dejar una herencia a mis hermanos y a mis hijos, a quienes yo bauticé en el Señor, tantos miles de hombres. Y no era digno ni merecía que el Señor concediera esto a su pequeño siervo: que después de tantas preocupaciones y cargas, después del cautiverio, después de muchos años me diera tanta gracia ante ese pueblo. En otro tiempo, en mi juventud, nunca esperé ni pensé algo así.

Padre Nuestro, Ave y Gloria.

Oración final:

Señor y Dios nuestro, que enviaste al obispo San Patricio para evangelizar a los pueblos de Irlanda, concédenos, por sus méritos e intercesión, que, quienes nos gloriamos de ser cristianos, anunciemos a los hombres tus maravillas. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.

Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén