En la historia del Perú, no se ha visto una marcha tan multitudinaria como la que se vivió el sábado 23 de marzo en Lima, que reunió a más de cien mil personas que alzaron su voz a favor de la vida y en rechazo al aborto en el país.

Familias enteras, adultos mayores, niños, jóvenes, sacerdotes, religiosas, políticos, personas del ambiente artístico, niños de orfanatos y con habilidades especiales, movimientos católicos, universidades, centros educativos, entre otras instituciones, hicieron de esta Gran Marcha por la Vida todo un éxito.

ACI Prensa captó las impresiones de algunos participantes, entre ellos el matrimonio de Rocío y Tito, quienes expresaron que tienen "10 hijos vivos, y uno en el cielo y que están esperando el onceavo, dije Si a la Vida", exclamó Rocío.

Otra familia de cuatro hijos y en espera del quinto dijeron que "¿Cómo es posible que se pueda pensar que se necesita matar un niño por nacer? No se puede gastar tanto dinero buscando derechos de cosas que son triviales. Nuestro derecho empieza desde que somos concebidos, desde ese momento tenemos derecho a la vida, por derecho divino, por derecho legal, por derecho constitucional".

El sacerdote agustino, Padre Ángel Ruiz, que por su avanzada edad participaba desde un bus que trasladó a niños y ancianos, dijo que "estamos aquí uniéndonos a los miles y miles de personas que están precisamente propagando que la vida es lo más grande que Dios nos ha dado. No al aborto que es un crimen horrendo, Si a la Vida".

La Familia Gonzales Reátegui, padres de cuatro hijos, señaló que "creemos en la vida, en los derechos del no nacido, es injusto que un niño que no se puede defender una madre sea capaz de matarlo".

Una laica consagrada de la Fraternidad Mariana la Reconciliación, Ana Martínez, calificó la Marcha "como un momento histórico para el Perú. Estamos aquí para darle la voz (a los no nacidos) y que la humanidad valore lo que es la vida".

La Familia Romero Morales con un hijo en brazos, señaló que es el cuarto año consecutivo que participa en la marcha con su familia, y que la "la vida es un derecho y debemos defenderla como comunidad familiar".

Una madre de familia que marchaba junto a su bebé que lo llevaba en coche dijo que "nosotros reconocemos al ser humano desde el embrión".

Por su parte, Luis Enrique Castillo, perteneciente al Ministerio de Jóvenes de la Renovación Carismática Católica, dijo que el sentido de salir a protestar en las calles es para que "no se cometa abusos contra los pequeños que no tiene voz. Estamos aquí para respaldar para que no se haga como otros países que se ha legalizado el aborto, para que aquí en el Perú se respete la vida de los pequeños".

También una pareja de adultos mayores, manifestó estar presente con toda su familia, sus hijas y sus nietas reclamando el derecho a la Vida "No al aborto, No a la Eutanasia".