23 de marzo de 2015 / 03:45 PM
Hace unos días el Papa Francisco reveló en una entrevista que le gustaría poder salir un día, sin ser reconocido "e irme a una pizzería a comer una pizza". Como es casi imposible que pueda gozar del anonimato, los trabajadores de una pizzería de Nápoles decidieron cumplir parcialmente este deseo.
El dueño y los empleados de la Pizzeria Don Ernesto decidieron hacer una entrega personal al Papa Francisco durante su viaje a Nápoles del sábado 21 de marzo. Prepararon una pizza especial con los colores del Vaticano, tomates amarillos, queso ricota y mozzarella di bufala, decorada con la frase "Il Papa".