17 de julio de 2017 / 03:21 PM
En 1987, cuando existía la grave amenaza del terrorismo, un grupo de 22 peruanos recibió un encargo que debía permanecer en secreto: construir el papamóvil que usaría San Juan Pablo II en su segunda visita al Perú, con un blindaje que pudiera soportar incluso armas de guerra.
Jaime Morales Dora, que en ese entonces tenía 25 años y que ahora es gerente de la empresa especializada en blindaje, American Security del Perú, recuerda que "en esa época el terrorismo amenazaba el país y las medidas de seguridad para recibir al Santo Padre debían ser extremas".
Han pasado 29 años de aquella experiencia de Morales quien comenta que recuerda eso cada vez que se tiene noticias de un Papa, como ahora que se ha anunciado la visita del Papa Francisco al Perú del 18 al 21 de enero.