El Vía Crucis en el Coliseo romano con el Papa Francisco se centrará en el sufrimiento de las víctimas de trata, por lo que las meditaciones del próximo Viernes Santo llamarán a una ayuda concreta.
En declaraciones a EWTN y ACI Prensa, sor Eugenia Bonetti, misionera de la Consolata y encargada de escribir los textos del Vía Crucis con el Papa Francisco de este año, dijo que aunque Cristo ha muerto hace dos mil años, continúa muriendo "en nuestras calles y nos pide ser nosotros mismos samaritanos, nos pide ser nosotros el Cirineo, ser nosotros la Verónica, de secar aquel rostro que tiene lágrimas, sudor, que está sucio por la calle, por la humillación, y Él nos pide hacer esto hoy".
Al saber que ella escribiría las meditaciones del Vía Crucis del Papa de este año, sor Eugenia dijo que no se asustó porque pensó que "cada persona que nosotros encontramos está viviendo su Vía Crucis".