“Dejadme ir a la Casa del Padre”. Estas fueron las últimas palabras que el Papa Juan Pablo II pronunció en polaco con una tenue voz seis horas antes de realizar su tránsito a la última y definitiva morada.
Según la prensa internacional, así lo revela un exhaustivo informe sobre la agonía y muerte de Juan Pablo II realizado en el Vaticano que será publicado próximamente.
El reporte de 220 páginas detalla cómo el entonces Pontífice, a las 3:30 p.m. del sábado 2 de abril, debilitado por la fiebre y con una cánula en la garganta, utilizó sus escasas energías en su conmovedora despedida. Después de entrar en coma a las siete, a las 21:37 se encontró con el Padre en un eterno abrazo.