9 de noviembre de 2014 / 03:24 PM
El Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU, Mons. Bernardito Aúza, afirmó durante la asamblea sobre sobre ''Globalización e interdependencia'' que "el desafío central de la agenda de desarrollo post-2015 es asegurar que la globalización ofrezca beneficios para todos", reduciendo la brecha de desigualdad que hay en la actualidad.
El representante vaticano señaló que "se necesita fortalecer el multilateralismo para ayudar a lograr este objetivo y para gestionar los diversos riesgos y desafíos relacionados con la globalización".
En su discurso brindado el 27 de octubre en Nueva York (Estados Unidos), Mons. Aúza dijo que la LXIX Sesión de la Asamblea General sobre ''Globalización e interdependencia''.