La Secretaría General del Episcopado Boliviano (CEB) calificó como "una aberración, que contradice los principios humanos y cristianos" el "usar las necesidades y aspiraciones humanas como recurso de cálculo político e instrumentalizar a grupos sociales como recursos de presión, más aún cuando estas medidas pueden conducir a lamentables enfrentamientos entre hermanos".
Ante los continuos enfrentamientos y reclamos contra el Gobierno, la CEB emitió un comunicado en el que señala que "no es responsable mantener un clima de enfrentamiento" pues no se "aportar con honestidad y transparencia a la solución de los problemas que atravesamos".
"La convivencia pacífica y estabilidad que demanda nuestro pueblo, no pueden ser abordadas solamente como mero discurso", aseguraron. "Corresponde a los dirigentes políticos, sociales y cívicos ofrecer propuestas concretas y justas, actuar con desprendimiento y escucharse mutuamente para lograr la solución de los temas de conflicto", manifiestan los obispos.