Una empresa australiana ha provocado controversia por usar embriones humanos como parte de las piezas de joyería que fabrica para sus clientes.
Recientemente, el sitio web australiano Kidspot informó del caso de una mujer que, tras someterse a varios procesos de fecundación in vitro (FIV) y concebir tres hijos, contrató los servicios de Baby Bee Hummingbirds para cremar y convertir en joyería los restos de los embriones que no se implantaron y quedaron congelados.
Baby Bee Hummingbirds es una empresa especializada a elaborar joyería como "recuerdo", con leche materna, placenta, cabellos, cenizas o cordones umbilicales.