Los Obispos de Estados Unidos pidieron oración y asistencia por los afectados y futuros afectados por los tornados que han afectado gravemente varios estados del sur del país.
Según NBC News al menos 33 personas han muerto después de que los tornados comenzaron a arrasar el sur el Domingo de Pascua, destruyendo casas y fachadas y dejando a más de 1 millón de personas sin energía eléctrica desde el lunes 13 de abril por la mañana.
"Los tornados y otras condiciones climáticas severas azotaron el centro de Texas la madrugada del domingo, trayendo granizo y daños 'gigantescos', y luego viajaron al este a través de Louisiana, Arkansas, Mississippi, Tennessee, Alabama, Georgia y las Carolinas", señala el medio.