El ataque terrorista que tuvo lugar este viernes por la tarde en la ciudad Alemana de Múnich ha suscitado la respuesta de los obispos alemanes e incluso del Papa emérito Benedicto XVI.
Un hombre disparó contra nueve personas –entre ellos tres turcos y tres kosovares– en un centro comercial de la ciudad, en lo que parece ser un ataque racista sin vínculos con el terrorismo islamista, según las autoridades.
El Papa Benedicto XVI "ha sido informado de que lo sucedido en Múnich, reza por las víctimas inocentes y expresa sus condolencias y cercanía a los familiares", ha dicho su secretario personal y Prefecto de la Casa Pontificia, Georg Gänswein, a la agencia ANSA.