11 de marzo de 2020 / 08:57 AM
Se cumplen 16 años de los atentados del 11 de marzo de 2004, en Atocha (España) en el que murieron 193 personas y más de dos mil resultaron heridas. Esther Sáenz viajaba en el vagón en el que estalló la bomba en la estación El Pozo, y aunque los médicos aseguraron que le quedaban 24 horas de vida, lo superó y vivió una profunda conversión en el Señor.
Esther Sáenz era farmacéutica, tenía dos niños y el 11 de marzo de 2004 viajaba en el tren de cercanías que le llevaba a Atocha, Madrid, donde estallaron varias bombas en un atentado terrorista.
El vagón en el que viajaba Esther fue en el que mayor personas fallecieron, tan sólo ella y otra persona sobrevivieron.