Cuando en Argentina los legisladores debaten la aprobación del aborto, el Dr. Ernesto Beruti, especialista en clínica obstétrica y ex jefe de la Maternidad del hospital Rawson (Argentina) recordó que en un aborto siempre hay dos víctimas: el niño por nacer y la madre, que por lo general termina sufriendo el síndrome post-aborto, a veces durante toda la vida.
En una reunión del Consorcio de Médicos Católicos en Buenos Aires, el experto señaló que "ante la tragedia del aborto siempre hay dos víctimas: la primera es el niño por nacer, que pierde el derecho más importante que tenemos todos los seres humanos, que es el derecho a la vida; la segunda es la mujer, que muchas veces lo hace por presión del entorno, del marido, de la familia, y muchas veces padece el síndrome postaborto, un calvario que le destroza el alma y la acompaña el resto de su vida".
El Dr. Beruti dijo que "hay que ayudar, aliviar, acompañar y no juzgar –con un concepto de total comprensión– a esas pobres mujeres que han tenido la desgracia de haber abortado".