Los obispos católicos de Burkina Faso y Níger, en un comunicado colectivo, señalaron que a los funerales solo deben asistir los familiares, en un intento por contener la propagación de COVID-19, después que Burkina Faso registrara la primera muerte debido a la pandemia de coronavirus.
Entre las medidas tomadas por los miembros de la Conferencia Episcopal de Burkina Faso y Níger (CEBN), los prelados ordenaron que las funciones y ceremonias de la Iglesia, como las reuniones familiares y los funerales, sean un asunto exclusivamente familiar con el fin de minimizar las posibilidades de propagación de COVID-19.
"La celebración de los funerales debe respetar escrupulosamente las instrucciones emitidas por el Estado para garantizar la seguridad de la salud de la población", resaltó la CEBN.