Para el Obispo de Ciudad del Este, Mons. Rogelio Livieres Plano, Paraguay solo logrará el cambio con la presencia y las acciones concretas de personas capaces de vivir la santidad en lo cotidiano.
Durante el novenario en honor a la Virgen de Caacupé, Mons. Livieres advirtió que un país venturoso se construye “sólo con hombres y mujeres santos; de lo contrario no debemos ilusionarnos; no crean que existe una solución mágica para estos hechos. Las personas buenas no se crean con leyes; eso no existe”.
Según el Obispo, conseguir ciudadanos honestos y responsables, capaces de transformar las estructuras de pecado, no se logra con leyes ni decretos, sino con la adhesión personal “a la presencia y ejemplo de Cristo”.