28 de mayo de 2008 / 04:35 PM
Los socialistas que constituyen el más importante bloque parlamentario del Congreso español, se sumaron a la primera minoría del Partido Popular en rechazar un proyecto de ley presentado por la Izquierda Unida que reclamaba retirar los símbolos religiosos de los actos de toma de posesión de cargos públicos.
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) argumentó su voto en contra señalando que las medidas contra la presencia cultural de la Iglesia Católica en España debe realizarse "sin apuro" y a un "ritmo lento".
La propuesta de IU pretendía eliminar el crucifijo, la Biblia y otros signos católicos de las ceremonias institucionales, tomas de posesión y demás actos oficiales; mientras que un partido regional minoritario exigía directamente la denuncia de los acuerdos del gobierno español con la Santa Sede, porque supuestamente reflejan "una situación de privilegio y preeminencia del catolicismo anacrónicas, fruto de otras épocas".