Los participantes en el Sínodo de los Obispos de la Familia, con el Papa Francisco, han emitido esta mañana una declaración sobre la situación que sufren las familias en Oriente Medio, África y Ucrania.
El mensaje muestra la preocupación por los conflictos armados, por la persecución religiosa en países como Siria e Irak y exhortan a una convivencia pacífica "fruto de la fraternidad, de la justicia, del respeto y del perdón".
"Desde hace años, a causa de sangrientos conflictos en curso (las familias) son víctimas de inauditas brutalidades. Sus condiciones de vida se han agravado en estos últimos meses y semanas", comienza el mensaje.