La Séptima Congregación General del Sínodo de la Familia reafirmó este jueves que el don de la vida y la virtud de la castidad "son valores fundamentales del matrimonio cristiano" y lanzó este jueves un llamado a los católicos a dar el mensaje de esperanza de que los niños son importantes para las familias y la sociedad, ante el drama del aborto y las consecuencias negativas de los anticonceptivos en la tasa de natalidad.
La Santa Sede informó que en la segunda parte de la congregación también se abordó el tema de la paternidad responsable y se denunció el crimen del aborto. Además se recordaron tragedias como el infanticidio, la violencia contra las mujeres o la trata de seres humanos. "Por lo tanto se insiste en la necesidad de enfatizar el concepto de justicia entre las virtudes fundamentales de la familia", señaló.
Los obispos también dialogaron sobre "la responsabilidad de los padres en la educación de sus hijos en la fe y en sus enseñanzas. Esa responsabilidad es primordial - se ha dicho - y es importante prestarle la debida atención. Entre otras cosas, se ha observado que la atención pastoral de los niños puede crear un punto de contacto con las familias que se encuentran en situaciones difíciles".