El Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Mons. Rubén Salazar, exhortó al Gobierno y a la guerrilla de las FARC a dejar de jugar con los secuestrados y pidió que estos sean “liberados inmediatamente sin ninguna contraprestación”.
Tras comentar que resulta muy triste la situación actual de los secuestrados, el también Arzobispo de Barranquilla recordó que el secuestro es un delito, constituye un atropello intolerable y que esta situación debe terminar.
"Yo pienso que con esta situación no se puede seguir jugando, no se pueden seguir sacando dividendos políticos, no se pueden seguir buscando oportunidades en ningún sentido. Hay un atropello a la dignidad humana y ese atropello tiene que cesar, por eso todos los secuestrados deberían ser liberados inmediatamente sin ninguna contraprestación", dijo el Prelado por lo que nuevamente ofreció la ayuda de la Iglesia Católica para la tarea de facilitación y mediación.