El asesinato de otro cristiano el fin de semana en la región de Mossul en Irak, mantiene el estado de terror en la región, donde la ola de violencia fundamentalista musulmana está amenazando con expulsar a la otrora floreciente comunidad cristiana de la región.
Adnan Al Dahan, un cristiano sirio, había sido secuestrado la semana pasada frente a su negocio de especias en el barrio de Al Habda en Mossul. El sábado su cadáver fue encontrado con perforaciones de arma de fuego en la cabeza.
Al Dahan se ha convertido en el quinto cristiano asesinado en seis días, y la policía local teme que los asesinatos se incrementen en vísperas de las elecciones legislativas del 7 de marzo.