El Papa Juan Pablo II hizo un llamado a los sacerdotes jóvenes a testimoniar a Cristo en un mundo que quiere vivir sin Dios, durante la Misa en la que ordenó 26 nuevos presbíteros para la diócesis de Roma.
“Si están llenos de Dios, seréis auténticos apóstoles de la nueva evangelización, pues nadie da lo que no lleva en su corazón”, enfatizó el Santo Padre en la homilía que pronunció en la Basílica de San Pedro.
El Papa señaló que los nuevos sacerdotes llegan en una época en la que “fuertes tendencias culturales parece que quieren hacer que se olvide a Dios, en especial entre los jóvenes y las familias”.