16 de septiembre de 2006 / 04:38 PM
"El Papa se ha hecho a sí mismo vocero de millones de personas en el mundo, también de los musulmanes, que sostienen que no existe necesidad alguna de mezclar la violencia con la religión", afirmó el Rector del Pontificio Instituto de Estudios Árabes e Islámicos, P. Justo Lacunza, en relación al discurso del Santo Padre pronunciado en la Universidad de Ratisbona..
En entrevista con Radio Vaticano, el P. Lacunza, indicó que "el Pontífice simplemente ha subrayado que no puede haber fundamento religioso en la violencia o la guerra".
"Al decir esto, el Papa simplemente ha retomado el sentimiento y el deseo de millones de musulmanes que de una manera u otra dicen: ‘la violencia y el Islam no pueden ir de la mano. Somos musulmanes y queremos ser creyentes musulmanes en el mundo de hoy y estar así contra aquellos que utilizan la religión para agredir a otros con la violencia’. La religión no puede ser fundamento de un conflicto, una guerra, cualquier forma de violencia, un ataque, o de la voluntad de eliminar a los otros", prosiguió.